Comunicatedigital.com / Karla García
Foto: Carlos Seoane
Vacunación a docentes genera caos y descontento.
El primer día de vacunación para personal de la educación en Los Fuertes en la ciudad de Puebla, trajo consigo el caos, conflictos y hasta jaloneos en las filas de aplicación de la dosis de refuerzos de la Covid-19.
Una vez más imperó la desorganización de la Brigada Correcaminos; encargados de la logística, quienes culparon a la gente de no respetar las filas ni los horarios establecidos para recibir la inoculación.
Jaloneos, gritos, insultos y filas distintas de docentes o personal administrativo demostró que fue rebasado el proceso con miles de personas que se dieron cita en este lugar.
Los puntos más críticos de la vacunación se dieron después de las 11:00 horas, cuando ya había más de una decena de filas de personas formadas quienes por la falta de información no sabían si era su fila correcta.
A lo anterior se sumó la población mayor de 50 años que aplicó la tercera dosis de refuerzo, así como jóvenes de 12 a 14 años con comorbilidades y de 15 a 17 años 2.a dosis Pfizer en el mismo sitio
En un momento se generó un zafarrancho en el que se hacían todos de palabras, y empujones. Todos se decían “colados”, por no estar formados y quererse meter en la fila.
Pocos minutos después llegó el personal de la Secretaría de Bienestar y elementos de la Policía Municipal de Puebla, que pidieron a todos paciencia y orden; pero no todos hacían caso al llamado de las autoridades.
La organización de la vacunación para docentes fue controlada por personal de la Secretaría de Bienestar a fin de mejorar la logística.
“Ni parece que somos maestros”, acotó una mujer quien tardó más de cuatro horas formadas para llegar al centro de inoculación.
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